“Tomar la decisión de buscar una Residencia Geriátrica es un tema complicado, te vienen a la cabeza comentarios de familiares que te provocan un sentimiento de culpa importante.
Con mi hermano hablamos con Papá y entre los tres llegamos a la conclusión de tomar una persona que se encargue de las tareas de la casa y que atienda a nuestro Padre en las cosas que necesite. Cansados de tomar gente que a los pocos meses no cumple con lo pactado decidimos buscar un lugar que nos conforme.
El primer inconveniente fue donde buscamos, yo vivo en Barrio Norte y mi hermano en Nordelta, concertamos un punto intermedio que nos quede bien a los dos, Belgrano, Núñez, Vicente López.
Visitamos varios que nos recomendó la gente del portal hasta que llegamos a la Residencia San Gabriel, tuvimos una entrevista y conocimos el lugar. En ese mismo momento sentimos que ese era el lugar. Ya pasaron 2 años y creo que fue una buena elección.”